
El tensiómetro es un dispositivo médico que se utiliza para medir la presión arterial de una persona. La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias y se mide en milímetros de mercurio (mmHg). Es importante tener valores normales de presión arterial para prevenir enfermedades cardiovasculares y mantener una buena salud en general.
Los valores normales de presión arterial varían según la edad, el sexo, el peso, la altura y otros factores. Generalmente se considera que la presión arterial normal es 120/80 mmHg. Esto significa que la presión sistólica (cuando el corazón se contrae y bombea sangre) es de 120 mmHg y la presión diastólica (cuando el corazón se relaja entre latidos) es de 80 mmHg.
Sin embargo, la presión arterial se considera alta cuando la presión sistólica es superior a 140 mmHg y/o la presión diastólica es superior a 90 mmHg. En este caso estamos hablando de hipertensión, una condición que aumenta el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y otros problemas de salud.
Por otro lado, la presión arterial se considera baja cuando la presión sistólica es inferior a 90 mmHg y/o la presión diastólica es inferior a 60 mmHg. En este caso hablamos de hipotensión, una condición que puede provocar mareos, desmayos, fatiga y otros síntomas.
Es importante tener en cuenta que los valores normales de presión arterial pueden variar según la edad. Por ejemplo, en personas mayores de 65 años, una presión arterial de 150/90 mmHg se considera normal, porque la presión arterial tiende a aumentar con la edad.
En resumen, mantener unos valores normales de presión arterial es fundamental para prevenir enfermedades cardiovasculares y mantener una buena salud en general. Si tiene preguntas sobre las lecturas de su presión arterial, consulte a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. ¡Tu corazón y tu cuerpo te lo agradecerán!